sábado, 28 de junio de 2008

Caminando

Estoy segura de que si vierais una calle japonesa en una foto, aunque estuviera hecha a drede para que no se viera ningún cartel, ninguna persona, ni nada que delatara el país donde se encuentra ésta; no hay duda de que sabríais que es una calle japonesa.

¿por qué? Supongo que por que tienen unos rasgos característicos, ¿No?

Yo podría decir que ya tengo la mente "envenenada". La costumbre ha dejado su huella en mí, y al caminar por éstas calles ya nada me sorprende.
Sin embargo hoy, al volver a casa al mediodía, he decidido cerrar los ojos un momento, borrar todo lo que yo había tachado "habitual" de mi mente, y mirar la ciudad con nuevos ojos. Así me daría cuenta de qué es distinto y qué no lo es.

Así pues, os pongo fotos que he tomado de algunas cosas habituales en las calles japonesas que no se suelen ver en otro lugar:



Os habéis fijado que las calles normales (no hablo de avenidas ni calles grandes), no tienen aceras? Podéis hacer la prueba con cualquier foto de una calle japo que veáis por internet; las aceras están reservadas a zonas muy concurridas. Normalmente hay que ir vigilando que no te atropellen ;)

Otra cosa apreciable en la foto de arriba y también en ésta:


Las calles de los barrios residenciales están plagadas de macetas. Quiero pensar que son duendecillos que ponen las macetas en la calle cuando llega la noche para darle color a la ciudad; pero mi lado realista me dice que ésto es una consecuencia de que tener patio sea un lujo imposible en Tokyo, que hace que los japoneses lleven su amor por la jardinería a mas allá de las puertas de su casa.

Otro detalle:


Los famosos parkings para enanitos. Muchas veces el coche no cabe entero y van sacando el morro por fuera. En la foto vemos otro ejemplo de lo mencionado antes; las macetitas de rigor y la ausencia de acera.
Lo curioso de éstos parkings individuales es que, a pesar de que la gente también los usa como trasteros y suelen tener las bicis, tablas de surf, o lo que haga falta en su interior; suelen estar siempre abiertos sea la hora que sea (supongo que que el coche no quepa con la puerta cerrada debe de tener algo que ver).

Otra cosa curiosa es el hecho de que es muy habitual encontrarnos casuchas o tenderetes ultra cutres al mas puro estilo gueto enmedio de la ciudad.
Normalmente cuando digo esto, la gente no me cree a la primera; se piensan que Japón, por su economía, debe tener un ambiente futurista y moderno... Pero eso no es necesariamente así.


Por ejemplo... ésta es la frutería de mi barrio ;)


Una casa random encontrada de camino...

Y para acabar, quién no sabe de los famosos postes de cables. En España solemos tener el cableado bajo tierra, pero... ¿Por qué en Japón siguen usando los antiestéticos postes?


La respuesta es sencilla: Los terremotos.
Imagináos que cada vez que temblara la tierra y algún cable se rompiera, tuviesen que levantar media ciudad para repararlo todo... ¿poco práctico, verdad?
Así pues, como ya comenté, descubrimos que todo tiene un motivo. Al conocer el origen de ésta antiestética costumbre, estoy seguro que a todos, de repente, no os parece tan mala ;)